Muchos de nosotros sufrimos o hemos sufrido estreñimiento en alguna ocasión, y sabemos que no es nada agradable ni saludable.
A la larga puede cronificarse, generar malestar o dolor abdominal e incluso cursar en patologías derivadas del mismo (fisuras anales, hemorroides, diverticulitis, incluso cáncer de colon o recto). Es por ello que debe evitarse en la medida de lo posible.
Algunas de las probables causas del estreñimiento son: mala alimentación, ingesta baja en fibra, poca actividad física, disminución de nuestra microflora intestinal, poca hidratación, haber tomado alguna medicación fuerte o antibióticos, hacer una dieta muy restrictiva, abuso de laxantes en épocas pasadas, viajes, cambios de horario…
Pero entonces… ¿Cómo podemos combatirlo y prevenirlo?
Es importante mantener una buena hidratación a base de agua a lo largo del día, evitando otras bebidas azucaradas, alcohólicas, o con gas.
La actividad física también es un factor importante, ya que nos ayuda a incrementar el movimiento peristáltico del intestino para mejorar el tránsito intestinal.
No abusar de laxantes. Lo ideal es mantener una dieta adecuada, rica en fibra y con un aporte suficiente en grasas cardiosaludables para mantener lubrificado el intestino.
Se pueden dar suplementos naturales para ayudar a mejorar la situación, o prevenirla. Por ejemplo, al tomar cierta medicación, o bien cuando estamos bajo situaciones de estrés. Algunos ejemplos son las fibras, que actúan como reguladores, o bien los probióticos, que ayudan a repoblar la microflora del intestino.
¡Una de las primeras barreras de defensa de nuestro cuerpo es el intestino! Es por ello que debemos cuidarlo.